En 2024, los hoteles de Suiza registraron 42,8 millones de pernoctaciones, la cifra más alta en más de 50 años. ¿Un factor clave? Los viajeros de lujo, especialmente de Estados Unidos, que están llegando en masa al país alpino en cantidades récord.
PUBLICIDADLos negocios están en auge para las personas más ricas del mundo. Y, por casualidad, también lo está el sector turístico de Suiza. En 2024, los hoteles de Suiza registraron 42,8 millones de pernoctaciones, la cifra más alta en más de 50 años. ¿Un factor clave? Los viajeros de lujo, especialmente de Estados Unidos, que están llegando en masa al país alpino en cantidades récord. A medida que se hace más evidente el impacto que tienen los viajeros adinerados en la economía suiza, el país está redoblando su apuesta por su condición de destino de lujo por excelencia.
Mayordomos de esquí privados, experiencias a medida y servicio VIP
Durante décadas, los paisajes prístinos de Suiza y su reputación de élite la han convertido en un imán para los viajeros adinerados. El país ha sido durante mucho tiempo sinónimo de exclusividad, desde sus hoteles de cinco estrellas y restaurantes con estrellas Michelin hasta chalés de esquí privados y servicios bancarios discretos.
Tras la pandemia, Suiza se está inclinando más hacia experiencias personalizadas y de alto nivel, diseñadas para unos pocos en lugar de para muchos. Los hoteles en destinos alpinos como St. Moritz, Zermatt y Gstaad han subido el listón con servicios que se podrían esperar de los complejos turísticos de lujo de la serie de televisión 'White Lotus': mayordomos de esquí privados para precalentar las botas, excursiones en helicóptero e incluso motocicletas Harley-Davidson para que los huéspedes las conduzcan.
Los alojamientos de cinco estrellas del país ahora incluyen los beneficios esperados, como chefs residentes y servicios de conserjería que ofrecen experiencias únicas en la vida. Algunos, como The Chedi, cuentan con extravagancias como una colección de miles de puros raros, que pueden costar hasta 8.600 €.
El turismo de lujo es un gran negocio
Según el Foro Económico Mundial, los multimillonarios mundiales aumentaron su riqueza colectiva en la asombrosa cifra de 1,94 billones de euros en 2024. En el caso de Suiza, la estrategia de atraer a personas con un alto patrimonio neto parece estar dando sus frutos.
El año pasado, las pernoctaciones de extranjeros aumentaron un 5,1% hasta los 22 millones, de los cuales los viajeros estadounidenses representaron aproximadamente una cuarta parte. Mientras tanto, los visitantes chinos e indios aumentaron en dos dígitos cada uno, lo que indica también un crecimiento en los viajes de lujo de larga distancia.
El compromiso con los huéspedes de lujo
Si bien puede que no sean grandes, los huéspedes con un alto patrimonio tienen un impacto considerable. Los hoteles de cinco estrellas representan solo alrededor del 8% de todas las pernoctaciones, pero los huéspedes que se alojan en ellos representan entre el 25 y el 30% de los ingresos totales del turismo de Suiza.
"Las cifras hablan por sí solas", dijo a la 'BBC' Markus Berger, de Turismo de Suiza. "La gran importancia económica justifica el compromiso con los huéspedes de lujo". Sin embargo, los críticos se han preguntado si estos visitantes de superlujo podrían dejar fuera de juego a los turistas locales. Se han producido historias de éxito similares en otros lugares, como en Roma, donde los alquileres a corto plazo han hecho subir los alquileres, obligando a los residentes a vivir fuera de la ciudad.
¿Cómo se compara Suiza con otros destinos de lujo para las vacaciones?
El auge del turismo de lujo en Suiza no se produce de forma aislada. Destinos de todo el mundo compiten por hacerse con una parte del mercado de lujo. Por ejemplo, Tenerife se está reposicionando como un destino exclusivo y ha lanzado iniciativas dirigidas específicamente a los viajeros de lujo estadounidenses, mientras que los complejos turísticos, desde las Maldivas hasta Austria y Grecia, ofrecen itinerarios personalizados, santuarios privados y complejos de bienestar independientes para atraer a de la alta sociedad adinerados.
Suiza ofrece un lujo discreto arraigado
Lo que Suiza espera que siga diferenciándola de otros destinos de lujo es su mezcla de grandeza del viejo mundo y opulencia moderna. Mientras que destinos como Dubái y las Maldivas prometen extravagancia, Suiza ofrece un lujo discreto arraigado en el patrimonio, el bienestar, las aventuras al aire libre y un servicio de primera clase (y a menudo de cosecha propia). Esa podría seguir siendo una fórmula ganadora para los viajeros más ricos del mundo, y más aún para la hospitalidad suiza.