La Justicia afirma que el rechazo de solicitantes de asilo viola la legislación alemana y no se ajusta al sistema de Dublín de la UE, que exige que cada Estado miembro lleve a cabo una investigación exhaustiva para determinar qué país de la UE es responsable de tramitar la solicitud.
El Tribunal istrativo de Berlín declaró el lunes ilegal el rechazo de solicitantes de asilo en las fronteras alemanas, asestando un duro golpe a la política migratoria del canciller Friedrich Merz y el ministro del Interior Alexander Dobrindt.
El tribunal se pronunció sobre el caso de tres ciudadanos somalíes que fueron deportados en la frontera con Polonia, subrayando que el Gobierno de Merz había violado las leyes de asilo. Según el tribunal, no se puede rechazar a un inmigrante sin examinar antes su solicitud de asilo.
Los somalíes, dos hombres y una mujer, fueron rechazados en una estación de tren tras solicitar asilo en la ciudad de Fráncfort del Óder, al este del país, después de llegar de Polonia el 9 de mayo. El tribunal dictó su resolución, que no es recurrible, tras estudiar los recursos de urgencia presentados por los inmigrantes.
Los jueces consideraron ilegal el rechazo de los extranjeros al afirmar que al menos uno de los inmigrantes tenía motivos legítimos para solicitar asilo. También añadieron que la política general del nuevo Gobierno conservador carecía de justificación legal.
Nueva línea dura en la política migratoria
El Gobierno de Merz había anunciado en mayo su nueva política migratoria de línea dura, que pretende reprimir duramente a los inmigrantes irregulares. La nueva iniciativa prometía detener por completo el proceso de asilo, congelando las solicitudes y rechazando a los solicitantes en las fronteras.
Según el Tribunal, la iniciativa no se ajusta a la política de inmigración de la UE: el sistema de Dublín. Según este sistema, Berlín está obligado a examinar a fondo las solicitudes y tomar una decisión caso por caso. También obliga a cada país miembro a realizar una investigación exhaustiva para determinar qué Estado miembro es responsable de evaluar la solicitud de asilo una vez presentada.
"La decisión del tribunal istrativo de hoy establece que debe llevarse a cabo un control de Dublín. Esto significa que el cruce de fronteras tiene que tener lugar, y Alemania tiene que comprobar qué Estado miembro es responsable del procedimiento de asilo", dice Dobrindt. "En esta decisión, el tribunal declaró que la justificación de nuestras medidas debería haber sido más específica. Esto significa que también estamos cumpliendo con esta demanda y proporcionando razones más detalladas".
Atentados y sentimiento de inseguridad en Alemania
Los controles en las fronteras fueron una promesa electoral del nuevo canciller, Merz, y del ministro del Interior, Dobrindt, aunque muchas voces críticas afirmaron que eran ilegales. Tras la decisión judicial, al menos un diputado pidió la dimisión de Dobrindt.
Pero Dobrindt insiste en que las presiones continuarán, y añade que cree que el Gobierno tiene un marco legal que respalda su política. "Por cierto, seguimos con las presiones. Vemos que la base legal está ahí y, por lo tanto, seguiremos procediendo de esta manera, independientemente de la decisión de este caso individual", dijo Dobrindt.
El nuevo Gobierno federal conservador había intentado justificar legalmente el rechazo de solicitantes de asilo en las fronteras mediante una cláusula de la Ley de Asilo alemana y un artículo del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea.
El artículo 72 permite a los Estados suspender la aplicación de la legislación de la UE en caso de amenaza al orden público. El tribunal de Berlín rechazó la premisa de invocar el artículo 72 alegando insuficientes pruebas de amenaza para el país.