La industria europea está analizando la lista de productos elaborada por la Comisión Europea en respuesta a los aranceles estadounidenses sobre el acero y el aluminio, y no todos los sectores están contentos.
Los aranceles de la Unión Europea a los productos estadounidenses están afectando negativamente a los productores de vino, fabricantes de plásticos y pasta de papel de la UE, entre otros sectores que dependen de productos importados afectados por los gravámenes o atrapados como víctimas colaterales de la guerra comercial entre ambos lados del Atlántico.
El sector del vino y las bebidas espirituosas fue uno de los primeros damnificados, al ser golpeado el miércoles por la amenaza del presidente de Estados Unidos de imponer derechos de aduana del 200% a las importaciones, en represalia por los aranceles de la Unión Europea al whisky bourbon estadounidense.
"Llevamos varios meses proponiendo a la Comisión Europea que adopte un enfoque positivo hacia Estados Unidos, basado en la reciprocidad, para salvaguardar el comercio bilateral de vinos y bebidas espirituosas", declaró Gabriel Picard, presidente de la Federación sa de Exportadores de Vinos y Bebidas Espirituosas (FEVS). "Al incluir los vinos y licores estadounidenses en sus medidas de represalia, acabamos preguntándonos si la Comisión Europea quiere que nuestra industria muera", señalaba.
Aranceles como represalia a las medidas adoptadas por Trump
En respuesta a los aranceles estadounidenses del 25% sobre el acero y el aluminio, la Comisión Europea presentó el miércoles medidas de represalia contra una lista de productos importados de Estados Unidos, que van desde la soja y la madera hasta las motocicletas Harley Davidson y el whisky bourbon.
Los representantes del sector del vino y las bebidas espirituosas señalan que ya han sufrido las peores consecuencias de las guerras comerciales de la UE, como la reciente disputa con China por los vehículos eléctricos, que llevó a este país a contrarrestar los aranceles europeos con derechos de aduana sobre el brandy europeo.
La industria europea de la pasta de papel también ha reaccionado tras ver las importaciones de productos estadounidenses. La UE importó de Estados Unidos pasta de papel por valor de 962 millones de euros y papel y cartón por valor de 650 millones de euros en 2023. A cambio, las exportaciones europeas de pasta de papel y cartón ascendieron a 238 millones de euros y 2.400 millones de euros, respectivamente. El sector no tiene ningún interés en una guerra comercial con los estadounidenses.
Jori Ringman, director general de la Confederación Europea de Industrias del Papel (Cepi), declaró a 'Euronews' que "los consumidores de la UE y de Estados Unidos que necesitan productos básicos de higiene" iban a verse afectados, así como "toda una serie de sectores que utilizan envases de papel".
La asociación profesional está examinando con lupa los aranceles aduaneros recíprocos anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de los que temen que pueda ser víctima el sector, y se prepara para responder a la consulta lanzada por la Comisión Europea sobre la lista de productos estadounidenses objeto de las medidas de represalia europeas.
La lista de productos presentada el miércoles está abierta a consulta de los representantes del sector hasta el próximo miércoles 26 de marzo. A continuación, se presentará a los Estados de la UE, que podrán oponerse a ella. El objetivo de la Comisión Europea es que entre en vigor a mediados del mes de abril.
Los aranceles y su impacto en las cadenas de suministro mundiales
El sector del plástico, blanco de las contramedidas europeas, también pide calma. "La imposición de aranceles, en particular sobre bienes industriales como los plásticos, perturbará las cadenas de suministro, elevará los costes para las empresas e impactará negativamente en los consumidores de ambos lados del Atlántico", afirma en un comunicado Virginia Janssens, directora general de Plastics Europe, quien reclama un "comercio libre y justo" entre ambos lados del Atlántico.
En 2023, el 11,7% de las exportaciones de plásticos de la Unión Europea se dirigieron a Estados Unidos (por valor de 3.400 millones de euros) y el 22,2% de las importaciones de plásticos de la UE procedieron de territorio estadounidense (por valor de 5.300 millones de euros).
La industria de productos sanitarios también está preocupada por ver afectados los componentes utilizados en su sector. "Instamos respetuosamente a la UE a que garantice que las tecnologías médicas y sus componentes queden excluidos de cualquier arancel de represalia", señaló Medtech Europe en un comunicado. "Garantizar el ininterrumpido a estos productos esenciales es crucial para mantener la atención al paciente y apoyar la resistencia de los sistemas sanitarios en toda Europa", añadió la asociación comercial europea que representa a las industrias de tecnología médica, desde el diagnóstico hasta la curación.