El líder del FPÖ, Herbert Kickl, encargado de formar gobierno, se opone a las sanciones contra Rusia, aboga por la emigración de extranjeros y rechaza el Pacto Verde.
El posible de Herbert Kickl a la Cancillería austríaca podría tener implicaciones para la UE en un momento en el que el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, la guerra de Ucrania y el informe Draghi sobre la competitividad europea llaman a los 27 a jugar como uno solo. Vuelta a empezar. El Partido Liberal de Austria (FPÖ), que en un principio se mantuvo al margen de las negociaciones para formar un Gobierno de coalición, se encuentra a las puertas de la Cancillería.
Tras el fracaso de las negociaciones entre conservadores, liberales y socialdemócratas, el Presidente Alexander Van der Bellen ha dado un giro de 180 grados y ha encargado al partido de extrema derecha FPÖ, liderado por Herbert Kickl, que forme gobierno.
Guerra en Ucrania
El FPÖ se opone vehementemente a las sanciones contra Rusia y al envío de armas a Ucrania, en nombre de la neutralidad austriaca. En nombre de este principio constitucional, adoptado en 1955, Austria no es, por ejemplo, miembro de la OTAN. "Les gustaría que la guerra terminara lo antes posible, signifique lo que signifique para Ucrania", afirma Stefan Lehne, investigador del 'think-tank' Carnegie Europe.
El endurecimiento de la inmigración
El rechazo a la inmigración es otro de los proyectos estrella del FPÖ. Herbert Kickl aboga por cerrar las fronteras, expulsar a los extranjeros y oponerse al derecho de asilo. "Ha pedido la formación de una fortaleza austriaca, esencialmente para protegernos de la afluencia de inmigrantes", declaró Stefan Lehne a Euronews.
El FPÖ rechazó el Pacto Europeo sobre Migración y Asilo, adoptado en 2024, que pretende intensificar la lucha contra la inmigración ilegal y garantizar una mayor solidaridad entre los Estados en caso de llegadas masivas de inmigrantes. "En esencia, quieren renacionalizar la política migratoria", afirma Stefan Lehne.
Menos Europa
Opuesto al Pacto Verde Europeo, Herbert Kickl es partidario de rebajar las normas medioambientales en Europa. Soberanista, el líder del FPÖ predica la devolución de ciertas competencias a los Estados sin abogar por una salida total de la UE. "Quieren una Europa intergubernamental sin instituciones supranacionales fuertes", explica Stefan Lehne.
Por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, el país alpino de 9 millones de habitantes podría estar dirigido por un canciller de extrema derecha. El Partido Liberal Austriaco (FPÖ) se impuso en las elecciones federales de septiembre con más del 28% de los votos, por delante del conservador Partido Popular Austriaco (ÖVP, 26%). Los socialdemócratas (SPÖ) obtuvieron el 21% de los votos, seguidos de los liberales (9%) y los verdes (8%).
El cordón sanitario no duró mucho. Los esfuerzos por bloquear su paso fracasaron. Obligado a formar un gobierno de coalición, probablemente con los conservadores del Partido Popular Austriaco (ÖVP), el FPÖ podría tener que poner un poco de agua en su vino.