La responsable de Política Exterior de la Unión Europea afirmó que las primeras señales procedentes de las fuerzas rebeldes sirias eran "buenas", pero que era "demasiado pronto" para emitir un veredicto.
PUBLICIDADLa actual transición de poder en Siria tras la caída de Bashar al Assad no debe derivar en "venganzas" y "represalias" entre facciones enfrentadas, ha instado Kaja Kallas al pedir la protección de las minorías y la libertad religiosa.
"Es una gran preocupación porque sabemos que en Siria hay muchos grupos diferentes", dijo Kallas el martes por la tarde en una sesión especial de la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo. "Las próximas semanas son definitivamente cruciales para ver si esto va en la dirección correcta", añadió.
En sus primeras declaraciones ante las cámaras desde los extraordinarios acontecimientos del fin de semana, Kallas elogió al pueblo sirio por su "logro histórico" y predijo que la transición presentaría "enormes desafíos" para la nación devastada por la guerra y para todo Oriente Medio.
En particular, la alta representante, que tomó posesión de su cargo a principios de este mes, señaló con el dedo los riesgos persistentes de violencia sectaria, extremismo, radicalización, "militarización de la religión" y terrorismo, "todo lo cual debe evitarse".
"Debemos evitar que se repitan los horribles escenarios de Irak, Libia y Afganistán", afirmó. "En segundo lugar, deben protegerse los derechos de todos los sirios, incluidos los de muchos grupos minoritarios. Y en tercer lugar, es crucial preservar la integridad territorial de Siria y respetar su independencia, su soberanía, así como las instituciones del Estado", añadió.
En cuanto al compromiso con Hayat Tahrir al-Sham (HTS), la fuerza rebelde que lideró la ofensiva que derrocó al régimen dictatorial de Al-Assad y que se ha posicionado como actor principal en la nueva era política, Kallas evitó entrar en arenas movedizas aunque itió algunos avances.
HTS, cuyo nombre significa "Organización para la Liberación del Levante", es una milicia islamista que anteriormente declaró su lealtad a Al Qaeda antes de romper lazos en 2016. Como consecuencia, la ONU y la UE incluyeron a HTS en la lista de organizaciones terroristas proscritas.
Aunque HTS y su líder, Abu Muhammad al-Jolani, han intentado ganar legitimidad abrazando el pluralismo y nombrando un primer ministro provisional, siguen plagados de acusaciones de abusos contra los derechos humanos, incluidas supuestas ejecuciones por blasfemia y adulterio llevadas a cabo en virtud de una interpretación estricta de la ley islámica.
Consciente de este delicado equilibrio, Kallas dijo que HTS sería juzgado "no por sus palabras sino por sus hechos" y advirtió que era "demasiado pronto" para emitir un veredicto. "Las primeras señales son buenas, pero no nos precipitamos a ningún tipo de acuerdo si no tenemos certezas", dijo Kallas a los eurodiputados. "Es importante que mantengamos estrechos os con los actores regionales y todos los actores internacionales para ayudar a Siria a construir una vida normal".
Debido a la designación terrorista, los funcionarios de la UE no pueden tener o directo con representantes de HTS. Estados Unidos, por ejemplo, confía en Turquía para transmitir mensajes sobre su política en Siria. Kallas no aclaró si estaba haciendo lo mismo.
En los últimos días, Kallas ha estado en o con sus homólogos de Marruecos, Líbano, Israel y Emiratos Árabes Unidos, entre otros. Otra cuestión planteada por los eurodiputados que quedó sin respuesta es si la UE llevará a cabo una rápida revisión de las múltiples sanciones que ha impuesto contra el régimen de Assad, que incluyen restricciones sobre armas, petróleo, tecnología y transacciones financieras.
Barry Andrews, legislador liberal, sugirió que, como primer paso, se ampliara la exención prevista en las sanciones que permite el flujo de ayuda humanitaria. Durante la sesión, que duró una hora, la alta representante insistió en que "redunda en interés de todos", incluidas la UE y la Liga Árabe, que Siria prospere en la era post-Assad y no caiga en otra guerra civil o crisis de refugiados.