Alemania autorizó recientemente el consumo restringido de cannabis, pero los clubes que la cultivan y venden afirman que se enfrentan a una burocracia farragosa.
PUBLICIDADNico Schack esperaba sacar partido de las nuevas leyes alemanas que permiten la posesión de cannabis, pero su sueño de montar un club para compartir la droga con otras personas en Berlín sigue pendiente.
En lugar de eso, ha decidido abrir una oficina en el vecino estado de Brandeburgo porque, según él, el proceso para obtener una licencia en la capital ha sido muy lento y poco claro.
"Creo que muchos clubes están muy inseguros ahora, porque los requisitos son muy altos, y todavía quieren esperar, quizá para tener una situación clara y saber que la [resolución de su] solicitud será favorable", dijo Schack, director general de Bunte Blüte.
Acudir a un club que cultiva y comparte cannabis es una de las formas que tienen ahora los consumidores de acceder a la droga desde que en abril se legalizó su consumo en Alemania, aunque con restricciones.
Sin embargo, los solicitantes para montar dichos clubes se están encontrando con diferentes niveles de burocracia dependiendo del Länder (Estado federado).
El Gobierno local de Berlín dijo a 'Euronews' que el departamento de Sanidad de la ciudad debería encargarse de su aprobación, pero antes hay que realizar un análisis de los costes. Mientras tanto, los distritos se harán cargo de ellos, en un proceso que los solicitantes califican de engorroso.
La lentitud del proceso es un obstáculo particular para los s de Berlín, que tiene un consumo de cannabis significativamente mayor en comparación con la media nacional. Una encuesta realizada en 2021, reveló que más de la mitad de los berlineses han consumido cannabis al menos una vez.
Alex Khourdaji, analista de la empresa de investigación Prohibition Partners, dijo que las dificultades podrían empujar a los consumidores hacia fuentes ilegales.
"Mucha gente que iba a establecerse sintió que era demasiado burocrático, así que decidieron no crear asociaciones de cultivo de cannabis", dijo. "Ahora, con menos asociaciones de cultivo de cannabis, eso deja a muchos consumidores en la oscuridad, y les da la actitud o la sensación de que podrían tener que volver al mercado ilícito".
Khourdaji añadió que muchos están optando por cultivar su propio cannabis. Un informe de Prohibition Partners afirmaba que crear clubes de cannabis es "un proceso largo y agotador".
Aunque se ha legalizado la posesión, esto no ha frenado el mercado negro, y los residentes pueden comprarlo ilegalmente en parques del centro de Berlín.
¿Otra vez ilegal?
La venta ilícita de esta droga podría favorecer a los detractores de su legalización y, en última instancia, conducir a la anulación de la ley que la permitió en un principio.
El partido conservador democristiano (CDU), líder en las encuestas, ha declarado a 'Euronews' que la anulación de la ley será una prioridad tras las elecciones del próximo año.
Añadió que se había producido un aumento masivo de la delincuencia relacionada con las drogas, pero el Ministerio de Sanidad respondió a 'Euronews' que aún no se dispone de estadísticas sobre este tipo de delitos para este año.
"Legalizar el cannabis fue un gran error", escribió en declaraciones a 'Euronews' Tino Sorge, diputado de la CDU y portavoz de Política Sanitaria de la CDU, y de su partido hermano, la Unión Socialcristiana (CSU).
"Las consecuencias para la salud de los niños y los jóvenes aún no pueden predecirse en absoluto", afirmó. "Por ello, es prioritario para el grupo parlamentario CDU/CSU revertir esta ley y detener sus efectos nocivos tras las próximas elecciones".
En cuanto a Schack, la incertidumbre que rodea la aplicación de la legalización del cannabis ha empañado un ambiente antes festivo.
"Llevaba muchos años esperando la legalización y luchando por ella, así que, por supuesto, estaba muy emocionado y deseando que llegara cuando se anunció", dijo. "Pero ahora todo el mundo está un poco decepcionado".