Algunos datos económicos como la inflación de la eurozona, los cambios en la tasa de desempleo de EE.UU. y las decisiones sobre los tipos de interés en la Reserva de Australia estarán en el punto de mira ante el temor a una recesión.
El sentimiento de aversión al riesgo prevaleció en los mercados mundiales durante la semana pasada. El presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó que impondrá aranceles a los automóviles, además de responder contra los contraataques comerciales ante la guerra arancelaria que él mismo inició tras comenzar su segundo mandato.
Además, los datos del gasto en consumo personal de EE.UU., más elevados de lo esperado, preocupan ante la posibilidad de que la economía estadounidense pueda estar entrando en estanflación -es decir, el proceso de convivencia de un proceso de estancamiento económico junto a una inflación elevada-, lo que podría repercutir en los mercados mundiales.
En este contexto, los datos de empleo de EE.UU. de esta semana serán objeto de un atento escrutinio, ya que cualquier indicio de debilitamiento del mercado laboral podría acelerar la caída de la renta variable. Los inversores también vigilarán las repercusiones económicas de los aranceles de Trump y las posibles medidas de represalia de Canadá, la Unión Europea y China. Otros datos económicos importantes que se vigilarán son los datos de inflación de la eurozona y la decisión sobre los tipos de interés del Banco de la Reserva de Australia.
La Unión Europea, pendiente de los nuevos datos de inflación y su industria automovilística
A mediados de marzo, la Comisión Europea anunció sus planes de imponer aranceles a la importación de bienes estadounidenses por valor de 26.000 millones de euros. Estas medidas incluyen el restablecimiento de contramedidas contra exportaciones estadounidenses por valor de 8.000 millones de euros, que entrarán en vigor el próximo martes.
Tras el anuncio de Trump de imponer aranceles, los mercados europeos de renta variable retrocedieron bruscamente desde los máximos casi históricos alcanzados la semana pasada, y los sectores automovilístico, sanitario e industrial fueron los más afectados. Si la confianza en los mercados sigue deteriorándose, podrían producirse nuevas caídas.
En el frente económico, Alemania publicará el lunes su IPC preliminar de marzo. La inflación anual se situó en el 2,3% en febrero, sin cambios respecto al mes anterior, mientras que se prevé que el IPC mensual aumente un 0,3% en marzo.
El informe de inflación interanual de la zona euro, que se publicará el miércoles, será otro tema clave. Los últimos datos del IPC de Francia y España sugieren que las presiones inflacionistas podrían haber disminuido aún más este mes. En febrero, la inflación en la eurozona se ralentizó hasta el 2,3% interanual, frente al 2,5% de enero, mientras que la inflación subyacente cayó hasta el 2,6%, su nivel más bajo desde enero de 2022. Las previsiones de consenso indican que la inflación general podría descender al 2,2%, mientras que la subyacente se situaría en el 2,5%.
La creación de puestos de trabajo se ralentiza en Estados Unidos, aunque sigue en niveles de pleno empleo
El viernes se publicará el informe de nóminas no agrícolas de marzo en Estados Unidos. El mercado laboral sigue resistiendo a pesar de los despidos masivos de trabajadores estatales tras los recortes de Trump a numerosos organismos públicos. En febrero se crearon 151.000 nuevos puestos de trabajo, mientras que la tasa de desempleo subió al 4,1% desde el 4,0% de enero. El salario medio por hora aumentó un 0,3% intermensual, ligeramente por debajo del 0,4% del mes anterior.
Las estimaciones de consenso sugieren que la creación de empleo podría haberse ralentizado en marzo, aunque se espera que se mantenga estable. El mantenimiento de la fortaleza del mercado laboral sería un indicador positivo para la economía estadounidense y los mercados bursátiles, pero también podría frenar las expectativas de nuevos recortes de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal.
Además, los datos del índice de gestores de compras se seguirán de cerca como indicador clave de la actividad empresarial estadounidense, en plena guerra comercial.
Australia, pendiente del paro para continuar el recorte de tipos
El Banco de la Reserva de Australia anunciará su decisión sobre los tipos de interés, con expectativas de que el banco los mantenga sin cambios. En febrero, el RBA los bajó por primera vez en unos 25 puntos básicos tras el inicio de la crisis inflacionista, hasta el 4,1%, en un contexto de enfriamiento de la inflación. Este dato cayó al 2,4% anual, mientras que la inflación subyacente se redujo al 2,7%, ambas dentro del rango objetivo del banco central. Sin embargo, la tasa de desempleo se mantiene por debajo del nivel "neutral para la inflación" del RBA, lo que hace improbable un segundo recorte consecutivo de los tipos esta semana.