Los mercados financieros se centran esta semana en los índices PMI manufactureros y de servicios, así como en la inflación de las principales economías.
La semana pasada, las bolsas mundiales se vieron presionadas por la preocupación de los principales bancos centrales por el crecimiento y la inflación, impulsados por los aranceles de Trump. Los inversores centrarán ahora su atención en los índices de gestores de compras (PMI) de la industria manufacturera y de servicios para conocer la trayectoria económica.
Además, la cumbre de la UE sobre la ayuda a Ucrania y el papel del bloque en las negociaciones de paz será un acontecimiento clave para la renta variable europea. Los datos de inflación de Australia, el Reino Unido, Japón y varias economías europeas también se seguirán de cerca a medida que se intensifica la guerra comercial mundial.
Este lunes, S&P Global publica una serie de índices PMI de la industria manufacturera y de servicios correspondientes al mes de marzo de las principales economías. Estos índices proporcionan información clave sobre la salud económica al medir la actividad en todos los sectores en función de los nuevos pedidos, el empleo y la confianza empresarial. Una lectura por encima de 50 indica expansión, mientras que una cifra por debajo de 50 sugiere contracción.
Desde la invasión de Ucrania por Rusia en 2022, el aumento de los precios de la energía ha disparado la inflación y provocado una rápida subida de los tipos de interés, lo que ha ralentizado considerablemente la actividad manufacturera mundial. La UE se ha visto especialmente afectada por los vientos en contra macroeconómicos, con su sector manufacturero en declive desde mediados de 2022.
La contracción más leve desde principios de 2023
En febrero, el PMI manufacturero de la eurozona mejoró hasta 47,6 desde 46,6 en enero, marcando la contracción más leve desde principios de 2023. Alemania, Francia, Italia y Austria registraron un menor ritmo de caída, mientras que la confianza empresarial subió a máximos de tres años, probablemente debido a la caída de los tipos de interés y a la recuperación económica de China.
Sin embargo, los aranceles del 25% impuestos recientemente por Trump a las importaciones de acero y aluminio podrían ejercer una nueva presión sobre el sector. Esta semana, la atención se centrará en los datos de Alemania y Francia, donde los PMI manufactureros de febrero se revisaron al alza hasta 46,5 y 45,8, respectivamente, aunque ambos se mantuvieron en profunda contracción. Se espera que los datos muestren una nueva mejora en marzo.
Por el contrario, el PMI de servicios de la eurozona lleva tres meses consecutivos en expansión, aunque el crecimiento se ralentizó en febrero al caer las nuevas empresas. El índice se situó en 50,6 el mes pasado, por debajo del 51,3 de enero. En Francia, el PMI de servicios se contrajo por sexto mes consecutivo, con una producción limitada por la debilidad de la demanda, la reducción de las bases de clientes y la fragilidad económica general.
Mientras tanto, el sector servicios alemán creció por tercer mes consecutivo. Las previsiones de consenso apuntan a un nuevo aumento del PMI de servicios alemán hasta 52,3 en marzo. En el Reino Unido, el PMI manufacturero de febrero se mantuvo en contracción en 46,9 por quinto mes consecutivo, y se espera que los datos de marzo se sitúen en 47,3. Mientras tanto, el PMI de servicios subió a 51, manteniéndose por debajo de 52 durante los últimos cuatro meses, ya que las empresas redujeron el gasto y la inversión debido a la incertidumbre económica. Se espera que el índice de servicios se mantenga en modesta expansión.
En EE.UU., el PMI manufacturero subió a 52,7 en febrero, reflejando una aceleración del crecimiento debida en parte al "adelanto de las compras en previsión de posibles subidas de precios e interrupciones del suministro vinculadas a las imposiciones arancelarias previstas". Sin embargo, el PMI de servicios cayó bruscamente a 51 desde los 52,9 de enero, lastrado por la incertidumbre económica. Las previsiones del mercado sitúan los PMI manufacturero y de servicios de marzo en 51,9 y 51,2, respectivamente.
Datos de inflación de EE.UU., Reino Unido y Europa
Los principales datos de inflación de esta semana incluyen el índice de gasto en consumo personal (PCE) de Estados Unidos, el índice de precios al consumo (IPC) mensual del Reino Unido y Australia, el IPC subyacente de Tokio de Japón y las cifras preliminares del IPC de Francia y España. El PCE estadounidense, el indicador de inflación preferido por la Reserva Federal (Fed), es fundamental para las decisiones de política monetaria. En enero, el IPC subyacente se ralentizó hasta el 2,6% interanual, frente al 2,9% de diciembre.
Sin embargo, la Fed elevó su previsión mediana del PCE subyacente para 2025 al 2,8% desde el 2,5%, citando "una mayor incertidumbre en torno a las perspectivas económicas". A pesar de ello, el presidente de la Fed, Jerome Powell, describió la inflación impulsada por los aranceles como "transitoria" y restó importancia a los riesgos de recesión. Una lectura superior a la prevista podría mantener la presión sobre las bolsas estadounidenses y alimentar nuevas ventas masivas.
En el Reino Unido, la inflación se aceleró hasta el 3% en enero, el nivel más alto desde marzo de 2024, lo que llevó al Banco de Inglaterra a mantener su tipo de interés oficial en el 4,5% la semana pasada. Se espera que la inflación anual se enfríe ligeramente hasta el 2,9% en febrero. Los inversores también analizarán el plan presupuestario del Gobierno británico, que se publicará el miércoles.
Se prevé que la inflación anual en España se reduzca al 2,7% en marzo, desde el 3% de febrero, el nivel más alto desde junio. Por el contrario, la inflación de Francia se confirmó en el 0,8% en febrero, la más baja en cuatro años, con expectativas de un ligero aumento este mes.