Este sábado tanto Israel como Hezbolá han confirmado la muerte de Hassan Nasrallah en el ataque del viernes que el Ejército israelí llevó a cabo sobre Líbano.
PUBLICIDADPocas horas después de que tanto Israel como Hezbolá confirmaran la muerte de Hassan Nasrallah, líder del grupo militante islámico; el portavoz del Ejército de Israel, Roni Kaplan, atiende con premura a 'Euronews' desde Tel Aviv en un día ajetreado para él y "muy importante".
"Es un día importante para todos los que luchamos contra el terror, no solo para Israel", asegura, haciendo referencia a los países cuyos ciudadanos han sido víctimas de Hezbolá, empezando por los propios libaneses o los "estadounidenses, británicos, ses, sirios y argentinos" porque "Nasrallah tenía las manos manchadas de sangre de miles de personas de estos países".
Hace días, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ya advirtió de que atacarían Líbano "con toda la fuerza". Lo han hecho. También prometió que no pararía "hasta alcanzar su objetivo". También lo han hecho, aunque la misión no se detiene con la muerte de Nasrallah porque "nuestro objetivo último", dice Kaplan, "es que la población civil de Israel deje de estar refugiada dentro de su propio país".
"Estamos hablando más concretamente de 60.000 personas que tuvieron que abandonar sus hogares en el momento en que Hezbolá se unió a Hamás en la lucha contra Israel a partir del 7 de octubre", añade.
¿Cuándo dejará Israel de atacar Líbano?
La pregunta entonces es cuándo Israel dará por concluidas sus operaciones sobre Líbano, algo que Roni Kaplan sabe con certeza: "Cuando Hezbolá deje de violar flagrantemente las resoluciones de Naciones Unidas". Mientras tanto, la posibilidad de realizar una invasión terrestre "sigue sobre la mesa".
"Si Hezbolá no se desplaza hacia el norte para recuperar la normalidad vamos a seguir de forma gradual y cada vez con mayor intensidad, golpeando al grupo terrorista y a sus cabecillas hasta que la población pueda estar en condiciones de seguridad. No se descarta la invasión terrestre de Líbano, pero tampoco está confirmada", asegura.
El máximo líder de Hamás ha reforzado su seguridad ante estos hechos. Es el otro objetivo del Ejército Israelí. "Aún no hemos llegado a él. Hemos llegado a otros líderes, pero no llegamos al líder supremo, pero lo vamos a hacer tarde o temprano".
Todo esto hace temer que el alto el fuego propuesto por Estados Unidos y Francia, rechazado en un momento y estudiado posteriormente por el Gobierno israelí pueda estar más lejos que nunca. De momento, no se va a llevar a cabo porque el Ejército no ha recibido "ninguna dirección por parte del Gobierno, así que seguimos adelante".